domingo, 9 de junio de 2013

360: juego de destinos.


FICHA TÉCNICA:

Año: 2011.
Duración: 110 minutos.
Director: Fernando Meirelles.
Guión: Peter Morgan adaptación de la obra de Arthur Schnitzler.
Fotografía: Adriano Goldman.
Productora: Coproducción entre Gran Bretaña, Austria y Brasil.

SINOPSIS:

 Durante un viaje de negocios, un hombre duda sobre serle infiel a su mujer. Una joven eslovaca se inicia como prostituta de lujo en Viena, a pesar de las críticas de su hermana. Una joven brasileña decide abandonar a su novio y volver a Brasil tras descubrir una infidelidad. Un hombre viaja a Estados Unidos para buscar a su hija desaparecida. Un peligroso recluso es trasladado hasta Denver para reinsertarse en la sociedad. Una mujer rusa decide dejar a su marido, un hombre metido en negocios turbios. Todos estos argumentos parecen guardar una relación, cual sera.


Una película muy sesuda, pesada, lenta y demasiado densa. Nos muestra una serie de sucesos sin aparente conexión, para mas tarde trazar una gran red entre las personas que viven esos sucesos, de tal manera que nos hace ver que todo lo que ocurre puede estar conectado, no cuenta con una gran historia si no que esta se forma con una serie de hechos que suceden a la vez y que cuentan con una estrecha relación. El argumento es quizá demasiado elaborado y denso, lo que hace que el espectador se canse de tanta conversación, en ocasiones insustancial, sin mas atractivo que ver cual es el hilo conductor de cada una de ellas con la otra, ademas este recurre a los tópicos temas del desamor, la traición, la infidelidad, el soborno, la falta de dignidad para conseguir dinero...etc, todos ellos conectados con un hilo demasiado fino y que tiene ha desintegrarse. Todo esto hace que el espectador se encuentre desorientado en gran parte de la película y que pierda el interés por la misma. En cuanto al reparto de actores algo atípico con actores tan buenos como conocidos como Jude Law y Anthony Hopkins  (cuyo talento se desaprovecha claramente), acompañados por unos secundarios muy poco conocidos y demasiado variopintos como por ejemplo  Rachel Weisz, Ben Foster o Moritz Bleibtreu, tanta diferencia de nacionalidades hace poco creíble la historia, ya que sin saber un idioma común se entienden perfectamente en las conversaciones. Todos ellos claramente desaprovechados con unos personajes sin ningún tipo de evolución, ni complicación escénica.
En el apartado técnico es una película sencilla, sin alardes y de la que solo se puede destacar la construcción de los planos, la cual se nos presenta totalmente innovadora, introduciendo espejos, multipantallas y demás elementos novedosos que la hacen visualmente atractiva en algunos momentos.

Una película que hay que ser muy fan del cine para terminar y que crea en el espectador una sensación de sopor muy poco recomendable en el cine, demasiado densa y muy poco atractiva. Un ritmo excesivamente lento que hace que se haga demasiado larga. Por lo tanto poco recomendable para el público en general, solo disfrutarán de ella los amantes de las películas sesudas y de las que se puede buscar un trasfondo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario