FICHA TÉCNICA:
Año: 2014.
Duración: 110 minutos.
Director: Rupert Wyatt.
Guión: William Monahan.
Música: Jon Brion y Theo Green.
Fotografía: Greig Fraser.
Productora: Paramount Pictures.
SINOPSIS:
Un profesor de inglés adicto al juego le debe a la mafia 40.000 dólares. Para ayudarle a salir a flote, su madre decide darle algún dinero que él trata de multiplicar rápidamente en Las Vegas, pero la suerte no le acompaña, por lo que su futuro estará en manos de la mafia.
Un buen remake, que se queda a la sombra de la película original, pero que a pesar de ello para todo aquel que no haya tenido la oportunidad de ver la original es un buen título.
Lejos de ser una maravilla si que consigue plantear un reto al espectador, el de intentar descubrir cual será el próximo paso del personaje sobre el que gira la misma. Este, es el alma mater del film aportándole todo lo que es, os gustará ver a Mark Wahlberg dejando de lado la acción y los personajes heroicos para verle en un papel mucho mas elaborado e intimista, algo que hay que reconocer que no es del todo lo suyo pero lo resuelve con solvencia.
Consigue enganchar al espectador en todo momento gracias a su lengua afilada y su moralidad dudosa, nos muestra un submundo muy peligroso de los casinos del que te engancharás al igual que le ocurre al protagonista gracias a su vivaz realismo. Sin embargo su ritmo lento, su larga duración y su complejidad lingüística harán que a un espectador acostumbrado a la acción se le haga una película demasiado densa y falta de atractivo, mientras que todo aquel que sea capaz de pasar por alto todo esto se sorprenderá de un guión cuidado al milímetro y unos diálogos realmente excelentes.
Su mayor atractivo es el de ver a una persona normal, con una vida normal meterse en una peligrosa vorágine de acontecimientos que le llevan a estar constantemente empezando de cero pero con mayor deuda.
Obtiene tanto realismo y tanta dureza visual y sentimental gracias a la práctica desaparición de todo aspecto técnico, de tal forma que se intenta aprovechar la potencia de imagen del cine de los años 70 sin adornos ni florituras que puedan hacer que el espectador se distraiga de la historia que se le pone frente a los ojos.
Una película recomendable para todo aquel amante de Mark Wahlberg que quiera verle en un papel al que no nos tiene acostumbrados y para aquel espectador que guste de una buena historia y un maravilloso guión (aunque para estos es recomendable rescatar la versión antigua).
Lo mejor el guión y sus diálogos.
Lo peor como siempre la comparación con cualquier tiempo pasado que sin duda en este caso fue mejor.